El Viaje y la Llegada

Que difícil cituación es estar en un avión que no para de sarandearse por las turbulencias y al lado mio la azafata dice “Tengo Miedoooo!!!!”. Así comenzo mi viaje para la hermosa ciudad Dominicana de Santo Domingo. Digo Hermosa aunque aun no la conozco, estoy apenas llegado y es la 1 de la mañana.

Luego de una escala en Panamá de aproximadamente 1 hora, la cual me sirvió para adquirir una cámara de fotos y un disco externo de 320G que claramente aun no entiendo, me bajo del avión en el aeropuerto de Santo Domingo. Al llegar a migraciones, un señor cortésmente me indica que pase por el puesto Nº5. Yo obediente llego al mismo con mi pasaporte en mano y la tarjeta de migarciones y se lo entrego a la persona del mostrador. La cual me mira con mala cara y me dice “no ves que esta la señora” a lo que la señora acota “y si, son turistas”. Aunque la señora ya había terminado su tramite en el momento de mi llegada al mostrador siempre es grato maltratar un turista por el simple echo de serlo.

Al pasar por la aduana me piden que abra mi valija, pero a los pocos minutos note que lo hacían porque su jefa estaba por detrás, al voltear la misma la cerraron automaticamente y me dijeron que me vaya.

Al salir de aeropuerto y no encontrar a Jesús (cuando hablo de Jesús estoy hablando de mi amigo Dominicano, no del supuesto hijo de Dios, el cual también es mi amigo pero no viajo esta ves) me puse en un rincón a fumar un cigarrillo y esperar. De a poco fui notando el bullicio y el griterío de la gente y me fui asustando cada vez mas, aunque lo que mas miedo me daba era que me había dado cuenta que no tenia ni la dirección, ni el teléfono de Jesús, es decir, no tenia manera de contactarlo.

Finalmente llego junto a Ambriorix y un joven mas el cual aun no recuerdo el nombre. Luego de los saludos correspondientes las primeras palabras de Jesús fueron “Como vas a extrañar Argentina”.

Paseamos un rato por la ciudad y paramos a cenar en un puesto, similar a los que hay en la costanera de choripanes, aunque con algunas diferencias, el pancho acá se llama Hot Dog, eso no es muy raro, es como en EEUU, lo raro es que a la Hamburguesa con queso la llaman Burger Shese, creo que querrán decir cheese.

Finamente llegamos a lo que sera mi hogar, la casa de una monja. A primera vista es una casa muy linda, en la cual tengo una habitación con un baño y luego un comedor y una cocina compartida. En este momento la casa esta vacía, es decir que vivo yo solo, pero en pocos días llegaran las otras personas que viven aquí.

Resumiendo un poco, porque el texto se hace largo y la gente es poco paciente para leer estas cosas, Son las 7:30hs de la mañana, hora Dominicana, en Argentina son 2 mas, quede con Jesus que pase a las 10 para empezar a hacer tramites y me estoy derritiendo del calor!!!!!